1. INTRODUCCIÓN.-

Extremadura es una región situada en el suroeste de España que es conocida por su enorme potencial minero de rocas ornamentales, ligado a la variedad geológica de la región.

El uso de la piedra natural extremeña comienza en la Prehistoria, continúa durante la dominación romana, época en la que se produce un desarrollo socioeconómico de gran envergadura y culmina en los tiempos actuales, en los que podemos decir, que Extremadura se ha convertido en una verdadera potencia mundial en el sector de las rocas ornamentales. La región cuenta con innumerables construcciones civiles, eclesiásticas y militares, dispersados por toda su geografía, desde el Dolmen de Lácara en el inicio de los tiempos, pasando por las Calzadas Romanas, el puente Romano de Alcántara y de Mérida, el teatro romano de Mérida, el Puente “Seco” de Coria y su Catedral, la ciudad monumental de Plasencia y Jerez de los Caballeros, las catedrales de Plasencia y Badajoz, la iglesia de Santa Eulalia de Mérida, Concatedral de Santa María en Cáceres y Mérida, la Plaza de Trujillo, sus Calles y el Castillo; la Plaza Chica de Zafra, el Castillo de Luna de Alburquerque, Medellín, Granadilla, Puebla de Alcocer y Montánchez, Monasterios de Yuste y Guadalupe. Cada pueblo grande o pequeño de Extremadura cuenta con un patrimonio histórico y cultural gracias en parte a la piedra y a sus canteros, arquitectos y artesanos que la cortaron, la diseñaron y que la colocaron en sus calles y plazas por su calidad, durabilidad, belleza y por la gran resistencia al paso del tiempo. 

Puente Romano de Alcántara

Teatro Romano de Mérida

2. UBICACIÓN GEOLÓGICA Y TIPOS DE ROCAS ORNAMENTALES DE EXTREMADURA.-

El límite entre dichas zonas viene marcado por el batolito de los Pedroches, una compleja intrusión ígnea de más de 200 km de largo por unos 15 km de anchura, que en Extremadura se descompone en varios plutones independientes (macizos de Quintana de la Serena, La Haba, río Guadamez, Mérida, etc.) perdiendo el carácter de lineamiento neto y separador de zonas. Otros autores han hecho otras propuestas en cuanto al límite entre las zonas Centro Ibérica y Ossa Morena, como la denominada falla de Azuaga o la zona de cizalla del eje Badajoz-Córdoba, así como la llamada falla de Villaharta o de Hornachos.

Además de las citadas unidades, afloran en Extremadura depósitos recientes del Terciario y del Cuaternario que forman parte del relleno de las cuencas del Tajo y Guadiana, entre otras.

Zona Centro Ibérica

Aflora en la mitad septentrional de la Comunidad Autónoma extremeña, siendo su elemento más característico la existencia de amplios afloramientos de una serie sedimentaria conocida como Complejo Esquisto Grauváquico (CEG) de edad Precámbrica-Cámbrica. Este complejo se estructura según anticlinorios separados por sinclinorios en los que aparecen series paleozoicas que incluyen desde el Cámbrico hasta el Devónico superior e incluso eventualmente el Carbonífero. Otro rasgo sobresaliente de la zona Centro Ibérica es la profusión de plutones graníticos que la atraviesan, mejor desarrollados al norte y centro de la región extremeña, en la que constituyen el llamado Batolito de Extremadura Central, así como la terminación occidental del Batolito de los Pedroches (macizo de Quintana de la Serena).

De esta manera, en la zona Centro Ibérica quedan incluidas un conjunto de bandas o unidades graníticas que de norte a sur son:

• Unidad Sierra de Gata-Sistema Central-Navalmoral. Formada por granitos de colores grises, localmente oscuros, variando de grano fino a medio.  Entre los macizos que la constituyen destacan los de Hoyos, Gata, Santibáñez y Sistema Central, subdividido de Oeste a Este en Bloque de Montehermoso, Bloque Tras la Sierra y Bloque de Gredos.
• Unidad de Extremadura Central.  Formada por granitos de grano fino a grueso, porfídicos, con colores muy variados que van de grises a oscuros y de beiges a blancos. Constituida esencialmente por los plutones de Zarza la Mayor, Cabeza de Araya, Alcuescar, Montánchez, Plasenzuela, Trujillo, Santa Cruz, Zorita, Zarza de Montánchez y Alijares.
• Unidad granítica de Alburquerque-Mérida-La Serena.  Ésta realmente se sitúa en las áreas de transición de la zona Centro Ibérica con la de Ossa Morena.  Son rocas de composición muy variable, texturas porfídicas, de grano fino a medio, homogéneas y con gran variedad de coloraciones. Está constituida esencialmente por los macizos de Valencia de Alcántara-Alburquerque, Mérida, La Haba, río Guadámez y Quintana de la Serena, además de por otras pequeñas intrusiones como las de Villar del Rey, la Roca de la Sierra y Guareña principalmente.

Zona de Ossa Morena

Ocupa el sector meridional de la región extremeña.  Sus rasgos más característicos son la existencia de amplias áreas donde afloran materiales precámbricos intensamente deformados y metamorfizados y la densa red de fracturas y zonas de cizalla con direcciones que varían entre ONO-ESE y NO-SE, que producen una compartimentación de la zona en bloques. Está constituida por unas bandas en las que afloran rocas más o menos metamórficas, de edad Precámbrica, separadas por otras con depósitos paleozoicos. Las rocas ígneas presentes en esta zona corresponden a granitoides calcoalcalinos precámbricos, granitoides prehercínicos y granitoides ligados al ciclo herciniano de deformación.

En ella se sitúa la cuarta unidad granítica que se diferencia en Extremadura denominada:

• Unidad granítica de Olivenza-Zafra-Monesterio. Es la que presenta la mayor variabilidad en tamaños de grano, composición y texturas debido a la gran abundancia de cuerpos intrusivos de diferente naturaleza, ácida, básica o intermedia. Entre los diferentes cuerpos que la constituyen destacan los denominados: Taliga, Barcarrota, Salvatierra, Brovales, Burguillos del Cerro, Fregenal, Valencia del Ventoso y Monesterio, entre otros.

Las rocas marmóreas también se encuentran incluidas en la zona de Ossa Morena, esencialmente en el área de Alconera, dentro del anticlinorio de Olivenza-Monesterio.

Todo ello nos lleva a referenciar desde el punto de vista de ubicación más que desde el punto de vista geológico, las áreas de rocas ornamentales que actualmente se extraen en la Comunidad de Extremadura.

Los materiales que se explotan y se transforman en Extremadura son los siguientes:

• Granitos
• Pizarras
• Mármoles
• Corneanas

Debido a la gran diversidad geológica que ofrece Extremadura existe otras posibilidades de rocas que pueden ser dedicadas al sector de la construcción, ornamental o de diseño de interiores. Muchos de estos materiales se están estudiando para buscarle aplicaciones verdaderamente rentables. Entre estos materiales se encuentran:

• Areniscas
• Cuarcitas
• Cuarzos
• Calizas

Las zonas indicadas se referencian contemplando el mapa de Extremadura de oeste a este y de norte a sur. 

GRANITOS:

Explotaciones de Granito

PIZARRAS:

Explotación de Pizarra

MÁRMOLES:

ZONA I: Alconera.

Explotación de Mármol

CORNEANAS:

ZONA I: Valencia de Alcántara

Prácticamente en la totalidad de estas zonas, se encuentran explotaciones de mayor o menor entidad en actividad, con lo que existe una gran variedad de materiales en el caso de los granitos con colores negros, blancos, beige, verdosos, amarillos, negros y blancos, azulados de diferente tonalidades, y veteados con diferentes tamaños y disposición granular. Las pizarras las encontramos de colores negras, rojizas o envejecidas, en tacos o para techar. Los mármoles de colores blancos, grises y negros. Y las corneanas, producto del metamorfismo de contacto de pizarras, de color negro intenso.

3. VARIEDADES DE GRANITO, PIZARRA Y MÁRMOL.-

VARIEDADES DE GRANITOS: